FRANCISCO XAVIER YRAUSQUIN
(20/9/1761- )
Único hijo varón de Don Manuel Yrausquin nacido en Coro, Estado Falcón, Venezuela, el 20 de septiembre de 1761 según consta en su partida de bautismo fechada el 28 de dicho mes. Quedó huérfano de su madre Doña Juana María Falcón Quevedo cuando tenía ocho años de edad. En 1778, siendo un joven de 17 años, su hermana María Isabel contrajo nupcias lo cual le causó un gran vacío que intentó llenar con sus estudios, aprendiendo a usar las armas, relacionándose con la sociedad coriana y administrando las propiedades paternas.
Con Doña Rosalía Aldama García, integrante de la mas alta sociedad de Coro y descendiente de Don Juan de Quevedo y Villegas (pariente del ilustre escritor español Don Francisco Gomez de Quevedo y Villegas), tuvo los siguientes hijos:
1. Carlos (casado con Isabel Ritt) 2. Sebastián (casado con Catharina Elisabeth Irausquin) 3. Nicolasa (sol 4. Francisco Xavier (casado con Josefa Aldama Quevedo García) 5. José María (soltero) 6. Ramón (soltero) 7. Manuel María (casado en primeras nupcias con Juana Eugenia Lopez y en su segundo matrimonio con Juana María Quevedo) 8. José Nicolás 9. Matilde (soltera) 10. Josefa 11. José Manuel 12. Hilario (casado con Valentina Bravo) 13. Cariñosa 14. María Francisca (muerta en Aruba en 1826) 15. Ignacia (casada con Manuel Antonio García Aldama) 16. María de la Paz (casada con Dámaso García) 17. José de la Rosa
Antes de 1789 se produjeron los alzamientos de los comuneros en la Nueva Granada y en parte de Venezuela con el propósito de protestar contra los impuestos y la administración de la clase mantuana, a la cual pertenecía Francisco Xavier. En 1795 surgió en la Sierra de Falcón la Rebelión de los Esclavos, movimiento eminentemente racista que estuvo acompañado de saqueos, asesinatos y otros excesos contra los blancos. A las atrocidades cometidas las autoridades españolas respondieron con la misma ferocidad, degollando a muchos detenidos solo con el proceso oral.
El movimiento fue debelado aplicándosele la pena máxima en las calles de Coro a uno de sus líderes llamado José Caridad Gonzalez. Su cabecilla, José Leonardo Chirinos, fue trasladado a Caracas donde fue condenado a muerte de horca, enviándose sus manos a Coro "para que una de ellas se clave en un palo de la propia altura, y se fije en las inmediaciones de la Aduana de Caujarao, camino de Curimagua, y la otra en los propios términos en la altura de La Sierra, donde fue muerto Don Joseph de Tellería".
El prestigio de Don Francisco Xavier Yrausquin, así como su calidad de hidalgo, su probada honradez, sus cualidades como administrador, su valentía ante el peligro, su fidelidad al Rey y la confianza que inspiraba a los dirigentes y a los vecinos de Coro, fueron algunos de los factores que motivaron su nombramiento a la edad de 46 años, como Regidor de Coro desde 1.807, cargo que desempeñó hasta que las circunstancias políticas adversas lo obligaron a abandonarlo.